domingo, 1 de abril de 2007

La niñez de momo

...A mi que no me vengan con heroína. Los tipos que se inyectan se convierten en adictos a la felicidad y eso no perdona, ya que a la felicidad se la conoce por sus estados de fallo. Para inyectarse hace falta tener ganas de ser feliz y esto sólo se puede ocurrirsele a un jilipoyas como una casa. A mí nunca me ha dado por lo dulce y si algunas veces he fumado mariguana con los amigos a sido por educación a pesar de que es a los 10 años cuando los mayores le enseñan a uno esas cosas. Y es que a mí la felicidad no me tira. Yo sigo prefiriendo la vida. La felicidad es una inmundicia y habria que darle un buen escarmiento. La felicidad no va con migo. Yo nunca hice politica, porque eso siempre beneficia a alguien, pero me parece que tendría que haber leyes que impidieran que la felicidad hizira de las suyas. Yo sólo digo lo que pienso. Puede que me equivoque, pero yo nunca iría a inyectarme para ser feliz. Mierda.




La vida ante sí por Romain gary (Emile Ajar)

3 comentarios:

Cam dijo...

"La sociedad inventa una lógica falsa y retorcida para absorber y canalizar la conducta de la gente cuyo comportamiento está fuera de los cánones mayoritarios. Supongamos que conoces todos los pros y los contras, sabes que vas a tener una vida corta, estás en posesión de tus facultades, etcétera, etcétera, pero sigues queriendo usar el caballo. No te dejarán hacerlo. No te dejarán hacerlo, porque lo verán como una señal de su propio fracaso. El hecho de que simplemente elijas rechazar lo que tienen para ofrecerte: Elígenos a nosotros. Elige la vida. Elige pagar hipoteca; elige lavadoras; elige coches; elige sentarte en un sofá a ver concursos que embotan la mente y aplastan el espíritu, atiborrándote la boca de puta comida basura. Elige pudrirte en vida, meándote y cagándote en una residencia, convertido en una puta vergüenza total para los niños egoístas y hechos polvo que has traído al mundo. Elige la vida.
Pues bien, yo elijo no elegir la vida. Si los muy cabrones no pueden soportarlo, ése es su puto problema. Como dijo Harry Lauder, yo sólo pretendo continuar hasta el final del camino..."


Del libro de Trainspotting.

Cam dijo...

Por cierto tronco me debes una dedicatoria, no creas que te vas a salvar :E!

Efraim dijo...

si si porke regalar un libro sin dedikatorio keda muy soso....te la debo...saludos! ;)